DALEKS

Bueno, dejadme empezar con esto diciendo que no tiene nada que ver con la maravillosa serie de televisión del Doctor Who. Esto es algo peor. Algo terrorífico. Algo...Desconocido.

Esos son los Daleks. Paran diferenciarlos de los Daleks del Doctor Who, yo los pronuncio "Day-Leks" para tener a los dos separados cuando hablemos de ellos.

Empezaré por el principio. Un día, hace unas cuatro semanas estaba caminando hacia mi casa desde la de un amigo y pasé por un basurero lleno de aparatos electrónicos inútiles. Encontré entonces una tarjeta de memoria sin usar para Nintendo Gamecube que decía "Dalek. Mantener contenidos." Dudé si cogerlo porque era un título extraño. Llegué a casa pensando en si debería usar esta tarjeta para mantener contenido al "Dalek". Allí estuvo, en mi escritorio una hora hasta que la curiosidad pudo conmigo y la decidí probar en mi Gamecube. Arranqué la vieja consola con la tarjeta para ver que contenía los datos de muchos juegos que no había jugado en años. Super Mario Sunshine, The Legend Of Zelda: Wind Waker e incluso Pikmin. Esto solo era una parte de los juegos que estaban en esa tarjeta. Se me hizo un poco extraño cuando llegué a lo que parecía el final y había una flecha que señalaba hacia abajo. Cuando bajé un poco más, mi Gamecube se apagó de súbito como si hubiese pulsado el botón "Power". Volví a intentarlo tres veces más para comprobar exactamente el mismo resultado. Me frustré y decidí empezar con mi Super Mario Sunshine para ver cuánto y cómo había avanzado el anterior dueño de la tarjeta.

Tenía que haber prestado atención a la advertencia de la tarjeta.

El juego empezó normal y se podía jugar normalmente. Había solo un archivo y este poseís 24 estrellas. Asumí que el anterior dueño del juego solo había jugado una vez, así que decidí terminarlo por él, ya que no tenía nada mejor que hacer en viernes. Noté algo extraño cuando jugaba. Todo el tiempo. Me giré hacia una esquina y juro que vi dos ojos azules encogiéndose en un edificio. Solo ojos, sin cuerpo. Solo dos ojos azules flotando. Esto no me gustó así que conecté mi cámara para grabarlo. Cada vez que lo tengo grabado, mi ordenador se bloquea. Yo solo seguí jugando sin cuestionarlo. Acababa de terminar la parte del hotel donde tienes que derrotar a unas mantas-raya. He muerto en la nada, antes de darme cuenta de que no era ninguna parte. Fueron los ojos azules, que saltaron sobre Mario y lo mataron instantaneamente, perdiendo así una vida. Desconcertado por esto, no me percaté de algo más extraño aún. Caminé alrededor de la Plaza Delfino para ver esos horribles ojos azules saltando hacia los personajes de la plaza y estos hacía la animación de Mario cuando muere y se desmayaban. Esto me llevó a algo más de la histeria. Reseteé mi consola, esperando que todo volviese a la normalidad. Todo fue bien. Jugué durante cinco horas hasta que obtuve 53 estrellas y decidí pasar a otro juego. Quiénquiera que sea esa "cosa" ya no estaba allí. Me dije a mi mismo que podría referirse a esto la advertencia sobre al Dalek de la tarjeta de memoria. Me encogí de hombros. Ahora era el momento de revivir mi infancia en la Gamecube. Abrí mi Legend Of Zelda Collectors Edition para jugar Ocarina Of Time.

Aqui vamos. Link estaba montando en un caballo. Lo primero que vi cuando tenía cinco años. Muy nostálgico ahora. ¡Entonces comenzó! Tenía una amplia sonrisa en mi rostro hasta que leí el archivo guardado, "Dalek". Mi sonrisa desapareció rápidamente. Miré el archivo para darme cuenta de que estaba también incompleta. Como alguien que jugó un rato y de repente se detuvo porque ocurrió algo realmente serio durante su progreso. Había guardado en el medallón del Templo del Fuego. Tenía solo cuatro corazones y medio de seis. La curiosidad mató al gato. Debía saber donde estaba. La partida cargó y aparecí en el Templo del Tiempo. ¿Normal, verdad? No. Epona y Saria que estaba sentada en su tronco tocando su canción, estaba en el Templo del Tiempo conmigo. Esto estaba muy mal porque, sencillamente, no podía ocurrir algo así en mi juego. NUNCA. Caminé fuera del templo y contemplé un deformado castillo de Hyrule frente a un guardia. "¡Aw, vamos!"- Podía haberme reído de los glitches de ese juego si no fueran así. Fui lanzado de súbito por el guardia y caí instantáneamente en una piscina de lava. Y si no os habeís dado cuenta de lo que ha pasado, escuchad. Yo era el Link adulto que fue llevado al castillo de Hyrule pero con el día y el mapa como si fuera todavía el Link joven. Link murió en la lava, obviamente, y fui tan estúpido como para pulsar A cuando me preguntó si quería continuar. Estaba en el Bosque Perdido donde Saria estaba sobre un tronco delante del Templo del Bosque. La cabeza de Link miró hacia arriba como cuando hablas con el buho. Se hizo un repentino zoom en la plataforma que está sobre la puerta del templo. Aquellos ojos. Aquellos condenados ojos azules. Exactamente los mismos que cuando estuve jugando a Super Mario Sunshine. Mi corazón se hundió y me estremecí al verlo de nuevo. La caja de texto apareció. Esta decía lo siguiente: "No puedes escapar de mi mirada". Presioné A. "Vista". Presioné A una vez más. "Vista". Esta vez, cuando volvi a pulsar A los ojos saltaron hacia mi y Link murió. Antes incluso de que apareciera la pantalla de si deseas continuar, pulsé el botón Power tan rápido como pude. Necesitaba encontrar algo. Decidí probar con otro juego. Ese juego tenía la peor atmósfera que yo podía haber usado para estar junto a esos espeluznantes ojos azules. Luigi's Mansion.

Estuve pensando sobre usar Luigi's Mansion durante la cena, pero resultó que no encontraba el juego. Sin darle importancia, decidí volver a jugar Super Mario Sunshine. Este comenzó pero en el momento en que apareció la pantalla de selección de archivo, Mario había desaparecido. Los dos ojos estaban en su lugar. Me estremecí de nuevo y los moví para seleccionar el archivo. Cuando seleccioné el archivo, en vez de notificarme de mis progresos, apareció un mensaje. Este decía "Esta vez seré yo el que cambie la atmósfera". Sentí un escalofrío recorriendo mi espalda. Mi Gamecube se reinició... ¿Por si sola? Esta vez, me llevó a un lugar a la derecha de la pantalla de selección de archivos. Como si acabara de entrar. Por raro que parezca, no sentí nada en la espalda esta vez. El cuarto al que entré a continuación era como el interior de una caja de Brik. Aunque vacía. Caminé y, por un marco de segundo, vi a Mario observándome desde un fondo rojo, sus ojos siendo cuencas vacías repletas de sangre. ¿Cómo podía ocurrir algo así? Estaba demasiado asustado para ver lo que podía ocurrir a continuación, así que apagué la consola y decidí jugar un poco a Minecraft. Solo quería un poco de alivio con videojuegos por la noche.

No pude dormir esa noche de viernes. Esataba demasiado ocupado pensando sobre qué es un Dalek. ¿Un fantasma? ¿Un demonio? ¿Un hack? ¿Qué macabra persona podría haber creado eso? Esto solo se mostraba en mi Gamecube. No importaba lo que jugase. Jugué a Super Smash Bros. Melee en busca de calma. Cuando estaba planenando enfrentarme a Mewtwo en su nivel 9 de dificultad había dos ojos azules en la pantalla de selección de escenario, justo en un escenario que parecía un escape al infierno. Se seleccionó solo. Era como un pequeño escenario con lava y chirriantes voces que costaba escuchar y la tonada de Pueblo Lavanda de Pokémon Rojo y Azul al revés. Me puse a temblar cuando reconocí la melodía. Creía que esa canción no estaba presente en Melee. ¿No es así? No podía ser. El nombre de todos los personajes era Dalek. ¿Qué quería "eso" de mi? Se mantuvo en todos mis juegos de Gamecube, acosándome sin pausa hasta que apagué la consola para jugar con mi Xbox 360 para hablar a mi amigo Bill sobre esto. Hablé con él sobre esto y tuvo un poco de miedo sobre si a él le podía pasar lo mismo. Así que jugamos al Halo Reach para calmar nuestro stress. Tiroteo. En un mapa llamado Courtyard. Todo era tan nornal como siempre, nosotros solo estábamos matando algunos soldados de élite cuando mi amigo me dijo que creyó haber visto un par de ojos azules matar a un élite. Me estremecí. Ahora esto se había me había ido de las manos. ¿Cómo podían estar ahí? Intenté negármelo a mi mismo diciéndome que yo había matado al élite. Pero esto empeoró. El cielo cambió a un tono carmesí y los élites parecieron preocuparse. Cuando miramos a los cadáveres, no tenía ojos y borbotones de sangre manaban de sus cuencas. Pero no parecía muy realista. Se veía solo como los gráficos normales del Halo Reach. Bill me dijo que se iba a marchar, así que terminé el juego y cuando apareció mi resumén mi personaje apareció muerto y decaido allí mismo. Seguía sin ser muy realista. Estuve a punto de vomitar por el miedo que me consumía dado que el Dalek me había obsesionado completamente. En lugar de aparecer la DMR, donde deberían estar sus ojos se adivinó un destello azul. Como los ojos del Dalek. No pude jugar más. Necesitaba una larga pausa alejado de mis consolas. Pero mi curiosidad no me dejó ir. ¿Entonces que podía hacer? Continuar.

Esperé y esperé en Courtyard justo después de que Bill se fuera para encontrar al Dalek de nuevo. Nada. Me sentí engañado. Y asustado. Era el momento de unas largas horas de sueño. Ojalá. Volví a mi Gamecube para ver si el Dalek estaba en la tarjeta de memoria. Fui a los archivos guardados de la tarjeta de nuevo. Me desplacé hacia abajo y el último juego de la lista era Pikmin. Solo que esta vez no me daban la opción de seguir bajando. Mi corazón se hundió. El Dalek no estaba allí. ¿A dónde había ido? Lo consideré una señal que me indicaba que me había dejado en paz. Pensé que esto por fin había acabado. Fui a mi cama con una sonrisa en el rostro.

Estaba muy equivocado.

Era domingo. Estaba en mi cama, pensando. ¿A dónde había ido el Dalek? No me importaba. Desde que mis amigos quisieron jugar en mi servidor del Minecraft lo tengo en marcha y funcionando. 4 personas se unieron inmediatamente (sin incluirme a mi). Lo dejé funcionando un rato, sentado en mi silla para relajarme. Mi teléfono sonó. Era Lukas. Me dijo que todo el mundo debía tener cuidado de unos puntos azules que podían matarte. Cuando dijo esto, me estremecí solo de imaginar qué podía ser. Me puse al Minecraft para conectarme al servidor justo en el momento de verlo. Cuando pulsé Conectar una llamarada de estática me golpeó a través de los auriculares a muy alto volumen. En la pantalla no aparecía el mensaje de Conectando y no salía un fondo sucio. Era negro y tenía un texto en blanco que decía "Gracias". Instantaneamente entendí qué me estaba agradeciendo. Lo había liberado. El tormento no terminaría ahí. Mi televisor estaba encendido. Pero yo no lo había encendido. Eran el mismo texto y el mismo fondo que en la ventana del Minecraft. Mi teléfono inmediatamente adoptó el mismo comportamiento. Abrí mi Nintendo DS y sus dos pantallas mostraban el mismo mensaje de fondo negro. Yo estaba temblando, asustado. Escuché algo débil. Era Pueblo Lavanda. ¿Qué relación había entre el Dalek y esa canción? Era como "The song of unhealing" (canción de curación al revés: aludiendo a el Creepypasta de Majora's Mask). El Servidor se cargó. Pero ese no era mi servidor. Era como una ciudad gigante. Era también maravilloso. A pesar de ello, seguía temblando puesto que esa imagen estaba en TODOS los aparatos digitales de mi cuarto. Di dos pasos antes de usar la lista de comandos. Funcionó. Cuando la lista apareció, esta decía "Dalek Dalek Dalek Dalek Dalek Dalek Dalek Dalek Dalek Hylam (Yo)". Eso debería ser lo que algunos compañeros mios denominaban "Bot city". La gente decía que nadie sabe de esta ciudad porque está perdida en... en... unos ojos... azules. Salté y traté de apagarlo todo. Mi televisión no se apagaba. La apagué a la fuerza con un martillo. Mi ordenador no se apagaba desenchufándolo, así que golpeé la pantalla. El Escritorio seguía en la pantalla, así que rompí el monitor lo más rápido que pude. Destrocé la pantalla de mi Iphone y partí mi portátil por la mitad para detenerlo todo. Estaba hecho. Respiré realmente aliviado y sintiéndome mejor... Hasta que recordé mi DS. La abrí para romperla, pero antes de eso vi un mensaje. Este decía "Gracias". En la pantalla de debajo decía "Ven a buscarnos"- Y justo en el momento en que lo leí mi DS se apagó. La encendí y en lugar del menú apareció otro mensaje. "Puedes recuperar tu vida si nos encuentras". Me sentí ligeramente aliviado. Y asustado sobre lo de encontrar a los Daleks. Pensé como el Dalek me observaba. Parecía una animación editada cuando se movía. Saqué mi televisión y mi monitor de repuesto que tenía en caso de tener que vender los otros dos. Mi portátil seguiría roto de todas formas, así que solo me encogí de hombros y dije "Otra vez será". Saqué la tarjeta de memoria y lo que vi hizo que me encogiera de nuevo. Estaba en blanco. La advertencia no estaba. Cuando encendí mi Gamecube todos los datos habían desaparecido. Finalmente perdí el gusto de sentirme realizado cuando jugaba antiguos juegos de Gamecube. Me hice a mi mismo una última pregunta.

¿Quiénes son los Daleks?